Calor en el frío de Minneapolis. La zona, que registra temperaturas ya próximas a los 0 grados, vivió sin embargo un momento cálido en el interior del Targer Center. En el duelo entre los Timberwolves y los Pistons, que se llevaron estos últimos en la prórroga, saltaron las chispas. Fue precisamente en los instantes finales del tiempo extra, con 123-126 para Detroit y todo por decidir. Entonces con el partido parado, todas las miradas se posaron en uno de los fondos. Blake Griffin, protagonista del duelo merced a sus 34 puntos, cruzaba posiblemente algo más que palabras con un aficionado de Minnesota sentado a pie de pista.
Blake Griffin was heated after what a Timberwolves fan yelled at him. Fan ejected… pic.twitter.com/E9DJrHZD6Y
— Dime (@DimeUPROXX) December 20, 2018
La disputa, que no fue a más porque Griffin supo calmarse muy rápido, frenado en parte por Zaza Pachulia, terminó con el aficionado expulsado de la pista del Target Center mientras que Griffin se reincorporaba al ritmo del partido y se unía al corrillo que sobre el parqué había montado Dwane Casey, quien pedía cabeza y daba instrucciones extras a sus jugadores. Los árbitros optaron por no llevar a más el asunto y expulsar al aficionado y no sancionar a Griffin, al menos sobre el terreno.
¿Multa para Griffin?
Porque lo que venga después puede ser diferente. No está claro qué se dijeron aficionado y jugador, pero si acudimos a un precedente reciente, Griffin podría ser sancionado por la NBA, quien cargó una multa de 25.000 dólares a Kevin Durant cuando a principio de temporada, en Dallas, le dijo a un fan local que le increpaba: “Mira el puto partido y cállate la puta boca”.